PREPARA TU PIEL PARA QUE LUZCA RADIANTE ESTE VERANO.

El cuidado de la piel, que para algunas personas puede pasar desapercibido, es de vital importancia ya que es el órgano más extenso del cuerpo humano.

Con la llegada del buen tiempo y una mayor exposición a los rayos del sol y a agentes contaminantes la piel se encuentra más desprotegida. No debemos olvidar que la función primordial de la piel es actuar como barrera de defensa del organismo frente al medio ambiente exterior y ejercer un trabajo de absorción y eliminación de sustancias.

Por otro lado, debemos destacar el papel que el silicio juega en la correcta conservación de la piel. El doctor Bernand Jensen observó la presencia de alteraciones cutáneas en pacientes que llevaban una dieta pobre en silicio. El silicio se encuentra presente en los recubrimientos de muchos vegetales como el salvado, el arroz, la cebada y los frutos secos. Una razón más para tomar el salvado y el germen de los cereales completos. Como podemos ver, la alimentación a base de harinas refinadas, sin el germen y el salvado del cereal, ocasiona un déficit de silicio.

A continuación detallamos las sustancias que ayudan a mantener la piel en buen estado:

1. Aceite de Borraja: tomar 2 perlas cada 8 horas. El aceite de Borraja es rico en ácidos grasos esenciales.

2. Aceite de Lino: tomar 1 cucharada al día o 2 perlas cada 8 horas. Al igual que el anterior es rico en ácidos grasos esenciales.

3. Aceite de Onagra: tomar 2 perlas cada 8 horas. Ideal para tratar el acné y la dermatitis.

4. Aceite de Rosa Mosqueta: tomar 2 perlas y/o aplicar localmente. Ideal para regenerar la piel, cicatrizar y combatir la piel seca.

5. Beta-caroteno: tomar entre 500-2000 mg al día. Ayuda a producir vitamina A.

6. Calaguala: tomar 2 comprimidos cada 8 horas. Ideal para tratar psoriasis, eczemas y problemas de descamación.

7. Zinc: tomar 25 mg al día. Los alimentos más ricos en Zinc son las ostras, hígado, almejas, carnes rojas, avellanas, almendras, anacardos, queso, avena, etc.

8. Manteca de Karité: aplicada localmente ayuda a nutrir e hidratar la piel. Perfecta para pieles o zonas agrietadas.

9. Vitamina A (Retinol): estimula la piel y las mucosas. Algunos de los alimentos más ricos en vitamina A son: zanahoria, hígado de bacalao, tomate, espinacas, pimiento rojo, etc.

10. Vitamina E: tomar aproximadamente de 400-800 UI al día. Ideal como antirradical (antioxidante). Muy presente en aceites vegetales, nueces, semillas de girasol, almendras, avellanas, etc.

Para terminar puedes encontrar todos o algunos de estos complementos de forma fácil en cualquier herbolario, uno de los más completos y de los que más recomendamos a diario en nuestro herbolario es “Bronze Natural de Drasanvi”; perlas a base de Aceite de Rosa Mosqueta, Tirosina, Betacarotenos, Tomate, Zanahoria, Alga Dunaliella, Licopeno, Vitamina C, Hierro, Zinc, Vitamina E, A y B2.  

RECIENTES ESTUDIOS HAN DEMOSTRADO LA EFICACIA DE 4 ELEMENTOS CLAVE EN NUESTRA ALIMENTACIÓN PARA REFORZAR EL SISTEMA INMUNOLÓGICO.

Polisacáridos: a destacar aquellos presentes en hongos como el Reishi (Ganoderma lucidum) y el Shiitake (Lentinus edodes).El Reishi es una seta de consistencia dura, que crece sobre troncos de árboles tanto en Oriente como en zonas cálidas de Europa y América. Contiene Lentinano de acción inmunoestimulante.El Shiitake contiene proteínas, vitaminas B y minerales. También destaca en ella el Lentinano, un polisacárido que actúa en el organismo estimulando la producción de un tipo de células llamadas linfocitos T. Estas células son capaces de destruir virus, defendiéndonos contra microbios. Por si esto fuera poco, el Shiitake es también inductor del interferón, que actúa como antiviral.

Vitamina C: denominada científicamente como ácido ascórbico se encuentra principalmente en frutas y hortalizas frescas. Los alimentos que la incluyen en dosis altas son: grosella negra, guayaba, pimiento rojo, acerola, kiwi, etc.  Los síntomas que pueden aparecer cuando hay carencia de esta vitamina son: cansancio y mala cicatrización.

Entre sus funciones más importantes destacan:

Antioxidante: neutraliza los radicales libres, sustancias que causan envejecimiento celular.

Aumenta las defensas contra las infecciones.

Contribuye a la formación del colágeno, mejora la consistencia de huesos y dientes.

Vitamina D: colecalciferol o vitamina D3. Entre sus funciones encontramos favorecer la absorción intestinal del calcio y del fósforo.  La exposición al sol de la cara, brazos y sobre todo las manos durante 5 a 10 minutos equivale a la cantidad que necesita un adulto diariamente.

Zinc: El zinc potencia la capacidad inmunitaria. El picolinato de zinc es una forma de este mineral fácilmente absorbida por el cuerpo humano. El germen de trigo, el sésamo, los frutos secos (como el anacardo) y las legumbres son alimentos con grandes cantidades de zinc.